El pasado mes de mayo Applynano Solutions estuvo presente en Iasi, Rumanía, en EUROINVENT, International Conference on Innovative Research, presentando el trabajo de investigación llevado a cabo por el National Research & Development Institute for Non-Ferrous and Rare Materials (IMNR, Bucarest) en colaboración con Applynano Solutions.
El título de la conferencia fue: Microencapsulated PCMs for thermal energy storage in the range 300-500 ºC: pilot-testing (Microencapsulación de PCMs para almacenamiento de energía térmica en el intervalo 300-500 ºC: validación escala piloto).
En el trabajo se han desarrollado materiales de cambio de fase (PCMs) microencapsulados mediante tecnología hidrotermal como sistemas de almacenamiento de energía térmica, con aplicación por ejemplo, en centrales térmicas o en procesos industriales con recuperación de calor. En centrales térmicas, ya se utilizan PCMs como sistemas de almacenamiento térmico para almacenar la energía generada cuando hay sol y poder utilizarla cuando hay demanda energética en momentos en los que no hay sol. Habitualmente, se utilizan materiales que presentan cambio de fase a temperaturas superiores a 300 ºC, y suelen estar basados en sales inorgánicas.
Sin embargo, estos materiales presentan dos inconvenientes principales: la falta de estabilidad tras realizar varios ciclos térmicos de enfriamiento-calentamiento y la posible corrosión en el contenedor donde se almacenan. Para superar estas limitaciones, se ha evaluado en este trabajo la microencapsulación de sales inorgánicas mediante tecnología hidrotermal utilizando recubrimientos también inorgánicos, estables, por tanto, a temperaturas superiores a 300 ºC. Los resultados obtenidos han demostrado la viabilidad de las sales inorgánicas microencapsuladas en propiedades químicas y térmicas, así como en estabilidad frente a ciclos térmicos. También se han obtenido valores elevados de conductividad térmica frente a los materiales sin encapsular, asegurando una mayor velocidad de carga y descarga de energía térmica. Actualmente, la colaboración con el Instituto IMNR continúa, quien ha diseñado y construido una planta piloto para la validación a escala piloto de estos materiales para su uso como sistemas de almacenamiento térmico.