Los concentrados de resina tienen un elevado contenido de óxido de grafeno. Se suministran listos para su dilución en resina, asegurando su dispersión y estabilidad. Su dilución y mezclado con resina hasta la concentración de óxido de grafeno necesaria puede realizarse mediante agitación convencional, obteniéndose la mejora de propiedades deseada, por ejemplo, de resistencia mecánica.
El óxido de grafeno aporta a la resina: mejora de la resistencia mecánica, adherencia fibra-resina en materiales compuestos, propiedades antibacterianas, propiedades barrera.